La verdadera cara de la "ley mordaza" - EboliNews

RJSamper. Detenciones aleatorias, insultos, trato vejatorios, DDHH olvidados, agresiones, humillaciones, encierros y todo con menores de por medio. Hay historias que si no te la cuentan de primera mano, puedes llegar a pensar en teorías de la conspiración, o en relato de de países “supuestamente” menos civilizados o dictaduras oficiales incluso. Así podría pensar una vez escuchado el relato de lo ocurrido el pasado sábado 8 de Febrero, tras la manifestación contra la represión de la “Ley Mordaza” en boca de Eduardo Fernández freira y lo sufrido por su hija Marina de 18 años, ambos de Pinto y dos amigas una también pinteña Y otra de San Martin de la Vega, ambas menores de edad.

Ese día, la manifestación realizaba un recorrido de Plaza Cibeles a Plaza España, aunque era de carácter pacífico, desde el primer momento un gran despliegue policial acompañaba La manifestación, la cual acabo sin incidentes sobre las 20.30 h.

Marina de 18 años y sus amigas (una de ellas con muletas), iban en cabecera junto a más personas. Una vez concluida, se dirigieron como cualquier joven un Sábado noche, a tomar algo al bar de un conocido, cogieron Gran Vía hasta tomar dirección C/Amaniel. En ese momento se percatan de gente corriendo detrás de ellas, gritando que corrieran, hecho que hicieron instintivamente, llegando a una plaza (Plaza Comendadores creen) donde distinguen a dos chicos jóvenes que parecían estar peleando en el suelo, en ese momento una de ellas, la de muletas, se acerca a ver qué ocurre e intenta separarles, sus amigas intentan disuadirla y van a por ella. Cuando están aproximadamente a 4 metros, oyen a unos supuestos (ya que no se identifican) policías de paisano que gritan “A por ellos”. Debido al susto y su juventud, salen corriendo, hasta que a unos 50 metros, un policía de paisano empotra a Marina contra la pared y con la ayuda de 3 compañeros la tiran al suelo, apretando con la rodilla su cabeza sobre la acera, a la vez que retorciéndola el brazo la esposan, oyendo mientras como un policía, ordena impedir grabar y dice “Ya tenemos detenidos”.

Después la pusieron de rodillas contra la pared junto a 3 más, hasta llevarles al furgón, a la amiga con “muletas” la trajeron agarrada del cuello y con la muleta en manos de un policía, andando con dificultad, negándose a dársela a pesar de pedírsela varias veces, obteniendo como respuesta “Puta, Zorra, Guarra” y no bastándole con eso, al meterla en el furgón y volver a pedir las muletas la respuesta fue “ Metete en el Furgón Hija de Puta”. La amiga se queja a otro compañero sobre los modos de este policía, teniendo como respuesta “si mi compañero te llama Hija de Puta es porque lo eres”.

En el furgón iban 6 sentados y dos en el suelo, seguridad vial ante todo,  y en ese momento se le ocurrió a Marina comentar que se mareaba, la respuesta del conductor fue zigzaguear bruscamente.

Una vez llegados a la comisaría de Moratalaz, son separadas, Marina como mayor de edad, se la llevan a tomar las huellas, momento que tiene la desfachatez de pedir que le aflojen la esposas y por supuesto la acción inmediata del policía es aprovechar para apretarlas más.

Son encerradas en un calabozo de 1,5x2 metros, con puertas compactas y una mirilla de  10 cm a la altura de 1,8 m. y les dan “una” manta pequeña, que no evita que pasen frio durante la estancia.

Sobre las 11h del Domingo 9 febrero, consiguen al fin hablar con el abogado, 14 horas después de ser detenidas, encontrándose a la vuelta, la comida tirada en suelo al lado de la taza de váter.

Ya sobre las 20.30 horas del Domingo (23 h. encerradas) les traen la cena, al terminar solicita que apaguen la luz  y a pesar de varias peticiones y de ser respondida continuamente  con un “vamos” no se la apagan hasta las 5 h. de la mañana  (7 h. después) dándola también Papel higiénico ya que carecía de ello.

Ya por fin, sobre las 8 H. de la mañana del Lunes 10 de febrero (35 h. después) se dirigen hacia los juzgados de Plaza castilla, no sin recibir insultos de tipo “donde guardas la droga, si quieres Metadona, Puta, Zorra” encontrándose con su amiga de las muletas que le dice que la han pegado e insultado de nuevo.

Una “supuesta “odisea, que nos cuenta Eduardo de una democracia vacía y una policía, con un “supuesto” trato a menores y jóvenes, que no solo da miedo, sino que también te hace pensar que si eso lo hacen a menores, que no harán a otros.

Verdad o no lo que nos cuenta, cada uno es libre de creer o no, yo si me pregunto  ¿Por qué  a unos jóvenes se les mantiene 35 horas encerrado como terroristas y delincuentes, por el mero hecho de ir a una manifestación? Claro dirán algunos, algo habrán hecho, como los trece casos absueltos que ya han ganado los abogados de legalSol frente a NINGUNO ganado por la policía de nuestra delegada Cristina Cifuentes. ¿Apostamos a que estos también? Solo espero que algún  día, alguien tome medidas  contra una policía que cada vez queda más demostrado su incompetencia e incumplimiento de leyes (negarse a identificarse, agresiones a periodistas son ejemplos), como se demuestra que ningún juez les ha dado la razón aun y lo único que hacen es manchar un cuerpo como el de la Policía nacional de un gran prestigio tanto nacional como Internacionalmente.

Por desgracia, ni son las primeras ni serán las ultimas por mi experiencia, algún día serán malos recuerdos, algún día.